
Arte y cultura
Así somos
En Gipuzkoa conviven expresiones culturales muy diferentes que, desde la tradición o en la vanguardia, vienen a decir los mismo: lo importante es encontrarnos y reconocernos en esa riqueza compartida, en esos esfuerzos creadores.
Aquí te sumerges en una de las culturas con más siglos de existencia de Europa. Eso no es mérito nuestro, viene de lejos. Nos caracteriza el idioma vivo más antiguo del continente y unas costumbres singulares. Puedes conocernos a través de restos arqueológicos o pinturas rupestres, de nuestras fiestas, tradiciones y deportes autóctonos, de museos donde exponemos nuestra historia y nuestro presente o por las vanguardias artísticas reconocidas internacionalmente.
Lo tradicional e identificativo convive con lo contemporáneo y adelantado a su tiempo en expresiones creativas de todo tipo. Gipuzkoa, en su variedad, es una cultura única e intensa que te impregnará en cada uno de sus rincones. Una riqueza singular que queremos compartir contigo.
Museos
Las distintas formas de descubrirnos
En Gipuzkoa tenemos museos en todos los sentidos. Los tienes para mirar y para sentir, para aprender y para divertirte, para recordar y para imaginar. Y cómo no, también para degustar.
Algunos tienen nombres propios, como Chillida Leku, un bosque de esculturas donde se concentra la obra del genial artista. O el Museo Cristóbal Balenciaga, dedicado al modisto originario de Getaria. Muchas de las temáticas levantan pasiones, como la del Museo del Ferrocarril, que incluye un viaje en vagón de madera propulsado por una locomotora de vapor. O el Museo de Títeres de Tolosa, apto para ilusiones de cualquier edad.
El de San Telmo tiene 120 años de historia pero también nos ofrece una mirada crítica y creativa de la sociedad actual. La influencia del carlismo en la vida guipuzcoana del XIX la encontrarás en el Museo Zumalakarregi y la de los romanos en el Museo Oiasso de Irun. No te pierdas cómo se hacían los primitivos buques balleneros y otras embarcaciones de pesca en el antiguo astillero Albaola, en Pasai San Pedro. Hasta el hierro tiene su museo temático. Y la sidra. Y el queso Idiazabal. Opciones para toda la familia y para todos los gustos. Imposible que te aburras.
Templos
El alma de cada pueblo
En el pasado fuimos un territorio convulso, de guerras banderizas y pugnas entre reinos. Sólo cuando se aplacaron floreció la construcción de nuestras iglesias y ermitas.
Se puede hacer un compendio de las diferentes épocas y estilos desde la ermita tardorrománica de La Antigua, en Zumarraga (llamada la Catedral de las Ermitas), pasando por la basílica barroca de San Ignacio de Loiola, con su majestuosa cúpula que la hace destacar del resto de manifestaciones religiosas, y rematando la visita con la vanguardia del Santuario de Arantzazu, en Oñati, donde confluyeron en la década de los 50 artistas de la talla de Oteiza, Chillida, Basterretxea o Sáenz de Oiza, que es como recitar el equipo titular de nuestra selección nacional de las Artes.
Pero en toda Gipuzkoa hay muestras notables de arquitectura religiosa. Ermitas circulares (Erdoizta), arquitecturas minimalista con la firma de Moneo (Iesu, en Donostia), o el fascinante recorrido de los templos góticos de la costa: Santa María de Deba, San Salvador en Getaria o San Vicente en Donostia. Entra y enciende tu vela. Iluminará su grandeza.
Monumentos y esculturas
Piedra y hierro
La lista de pueblos de Gipuzkoa convertidos en un inmenso museo al aire libre es extensa. Historia y Vanguardia se suceden o se solapan en rutas escultóricas que permiten disfrutar de las diferentes expresiones creativas de artistas vascos a lo largo de los siglos.
Tolosa o San Sebastián por ejemplo, ofrecen en sus calles y atalayas un fascinante recorrido escultórico de aquella generación de artistas vascos (Oteiza, Chillida, Mendiburu, Basterretxea, Ugarte…) que renovó el arte escultórico contemporáneo, un recorrido que se actualiza constantemente con obras de Dora Salazar o Cristina Iglesias.
Pero no sólo podrás encontrar vanguardia en tus paseos. Cascos históricos como los de Oñati, Segura, Hernani, Hondarribia te ofrecerán en cada recodo palacios, fuertes, necrópolis medievales o Universidades renacentistas.
Y todo lo tienes cerca. Estás en un territorio donde historia y arte se funden en un muestrario de emociones condensado y exuberante.