Gipuzkoa ofrece la oportunidad de refrescarse este verano en parajes naturales, además de las playas y piscinas.
EMBALSE DE URKULU: Escondido entre las fuentes del río Deba, sobre una fértil meseta natural y rodeado de cumbres calizas, el embalse de Urkulu es un enclave perfecto para un día en familia. Se puede practicar piragüismo, equitación y observación de aves. Y caminar o pedalear por el bidegorri de 6,5 km que rodea el embalse.
LAREO: En Lareo hay un recorrido corto y sencillo ideal para toda la familia y sin tiempo para aburrirse, pues tiene mucho que ver. El camino atraviesa un hayedo, en el que veremos cuevas, simas, túneles excavados en la roca y riachuelos, para finalmente llegar al embalse de Lareo. Rodeados de monte y hayas, proponemos dar la vuelta al embalse, disfrutando del paraje y también del dolmen que allí se encuentra. Es un recorrido llano de 7,3 km., que se puede realizar tranquilamente en 2 horas.